Con pláticas dirigidas a las niñas y niños, un grupo de jóvenes se empeña en sembrar la semilla de la educación ambiental en este municipio para abonar a la conservación de la flora y fauna de la zona.
“El objetivo por ahora es trabajar con niños, veremos después cómo la comunidad morelense desenvolverá todo esto, aunque nuestro objetivo más adelante también será trabajar con las personas adultas”, explicó Liliana Chan, líder del colectivo “Manos a la Tierra”.
“Queremos empezar con ellos (las niñas y niños) para promover la idea de la conservación, la idea del respeto hacia estos animalitos”, señaló por su parte Yerico Meléndez, director de la Asociación para la Conservación de los Anfibios y Reptiles de Quintana Roo.
Ambos fueron entrevistados durante un encuentro con estos infantes, a quienes les llevaron una rana, para que puedan admirar este ejemplar, para dejar atrás prejuicios como que es un animal “feo” o indeseable.
Para ellos es muy importante poner a los menores en contacto con la naturaleza, pues la falta de conocimiento y la mala información es una de las principales problemáticas que enfrenta el municipio, porque existen falsas creencias y mitos sobre ciertas especies, quienes en consecuencia, muchas veces resultan víctimas de ataques.
Añadieron que el objetivo es transformar el miedo en respeto por a fauna de la región, en especial a los reptiles y anfibios.
“Todo esto tiene un objetivo es común que es lograr preservar a nuestras especies que tenemos aquí en la zona maya”, concluyó Liliana Chan.
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