El primer ministro británico, Boris Johnson, dijo el lunes que se confirmó que al menos un paciente murió después de haber sido infectado con la cepa del coronavirus Omicron.
«Lamentablemente, sí, Omicron está produciendo hospitalizaciones y, lamentablemente, se ha confirmado que al menos un paciente murió con Omicron», reveló Johnson durante una visita a una clínica de vacunación cerca de Paddington. «Así que creo que la idea de que de alguna manera se trata de una versión más leve del virus, creo que es algo que debemos dejar de lado y reconocer el gran ritmo al que se acelera a través de la población».
El primer ministro subrayó que «lo mejor que podemos hacer es ponernos todos nuestros impulsores», haciéndose eco del sentimiento que tenía cuando el nivel de alerta de COVID en Reino Unido se elevó a cuatro debido a la propagación de la cepa Omicron.
El domingo, Johnson hizo sonar la alarma y dijo que el Reino Unido ahora «se enfrenta a una emergencia» a medida que la nueva variante arrasa el país. Para hacer frente al nuevo brote, el primer ministro dio a conocer un ambicioso plan de vacunación. Su nuevo objetivo prevé que todos en Inglaterra mayores de 18 años sean elegibles para un jab de refuerzo antes de fin de año.
