Agencias

En la tercera fase de los ensayos, la vacuna rusa contra el COVID-19 demostró una eficacia global de entre 91.6% y del 100% para los casos graves de la enfermedad.

El análisis incluyó datos sobre 19 mil 866 voluntarios que recibieron tanto la primera como la segunda dosis de la vacuna Sputnik V o placebo en el punto de control final de 78 casos confirmados de COVID–19.

La eficacia en el grupo de ancianos de 2 mil 144 voluntarios mayores de 60 años fue del 91.8% y no difirió estadísticamente del grupo de 18 a 60 años.

Entre los casos analizados, más del 98% de los voluntarios desarrollaron una respuesta inmune humoral y una respuesta inmune 100% celular.

El nivel de anticuerpos neutralizantes del virus de voluntarios vacunados con Sputnik V es 1.3–1.5 veces mayor que el nivel de anticuerpos de los pacientes que se recuperaron de COVID–19.

La mayoría de los eventos adversos (94%) fueron leves e incluyeron síndromes similares a la gripe, reacciones en el lugar de la inyección, dolor de cabeza y astenia.