Infobae
La farmacéutica AstraZeneca informó este viernes a la Unión Europea que recortará en un 60 por ciento las entregas iniciales de su vacuna contra el COVID-19 por problemas de producción.
En concreto, el laboratorio sueco-británico explicó que la razón es “una caída del rendimiento en un centro de fabricación de nuestra cadena de suministro europea”.
Ello se traducirá en la posibilidad de entregar 31 millones de dosis durante el primer trimestre de este año, en contraste con las 77,5 que hubiera constituído el 100 por ciento de la cifra.
El bloque supranacional aún no ha aprobado el uso de la vacuna, pero un portavoz del laboratorio especificó a la agencia AFP que si bien “no hay un plazo previsto para el inicio de los envíos, si recibe la habilitación serán inferiores a los previstos originalmente”.
“Vamos a suministrar decenas de millones de dosis en febrero y marzo a la Unión Europea, y seguimos aumentando los volúmenes de producción”, añadió, sin especificar cantidades exactas. La Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) recibió el 12 de enero la solicitud de autorización del inmunizante, e indicó que podría tomar su decisión el 29 de ese mes.